Para desarrollarte como persona es importante que sepas identificar
cual es tu actitud ante la vida y con que actitudes te mueves en tu día a día.
Citando a R. Jeffress podemos
afirmar que la actitud es una
respuesta mental y emocional ante las diversas circunstancias que se presentan
en la vida. No son específicamente conductas sino modos o formas de actuación.
Para entenderlo mejor voy a poner
un ejemplo de como actuamos ante una situación mucho más cotidiana de lo que quisiéramos: Cuando
llegamos tarde una cita.
En esta situación propongo dos
respuestas posibles.
1. lo siento
hay mucho tráfico en la carretera
2. lo siento
he salido tarde de casa
Fíjate que las respuestas son muy
distintas.
En la primera, estas dando la
responsabilidad de llegar tarde al tráfico, o sea a un tercero. Esto significa
que en el futuro no vas a poder desarrollar acciones para llegar puntual dado
que la situación del tráfico es impredecible y, escapa a nuestra gestión.
En el segundo caso, estas
asumiendo la responsabilidad de llegar tarde, por lo tanto a futuro si que
estas empoderado para emprender acciones distintas, para obtener respuestas
diferentes, y llegar puntual a tu cita.
La actitud se refleja en acciones
y, a través de gestos, movimientos, gritos, risas, llanto o incluso, apatía y,
siempre corresponden a estímulos internos, es decir, a estímulos ya aprendidos.
Por lo tanto, no se puede tener una actitud frente a lo que no se conoce o no
se valora, como bueno o malo, en cierto
modo, todos nuestros actos están relacionados con nuestras creencias.
Es importante que todo esto sepas
llevarlo a tu vida diaria, así podrás ver que tipo de decisiones tomas en
función de la actitud que tienes hacia ellas.
A continuación te dejo una serie
de sugerencias para que generes hábitos y tener siempre una actitud responsable
frente a tus acciones y decisiones, ya que te empoderan y dan fuerzas para
conseguir tus metas y objetivos aunque las decisiones a tomar sean complicadas.
Sugerencias prácticas para tener
una actitud responsable:
- Asume total responsabilidad por tu bienestar.
- Siéntete merecedor de lo que quieres.
- Haz una lista de los talentos y habilidades que tienes y reconoce las cosas que más valoras.
- Observa que dirección quieres darle a tu vida. Como eres responsable toda experiencia se transforma en aprendizaje.
Lidera tu actitud porque de eso
depende que alcances tu meta.
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